Cómo cuidar tus plantas reutilizando el té
¿Qué beneficios tiene el té para el cuidado de nuestras plantas?
En el blog de hoy, vamos a hablar de un truco que muy poca gente sabe, para poder cuidar tus plantas de forma natural y muy efectiva.
Puedes hacerlo tanto con tus plantas de interior como con las de exterior.
Para ello, el elemento principal que necesitaremos serán las hojas de té que ya han sido utilizadas para hacer tu infusión. El primer paso antes de empezar a crear tu propio compost natural para tus plantas, será dejar reposar uno o dos días las hojas de té que hayas utilizado anteriormente.
Recomendamos guardar el té a granel en un recipiente opaco y hermético para prolongar su vida útil. Para mantenerlo fresco, hay que proteger las hojas de té de la exposición al aire, el calor, la luz y la humedad. Hay que evitar guardarlo cerca de cualquier fuente de calor, como una estufa o una ventana en la que suela dar el sol.
Existen dos maneras:
- Coloca las hebras de té usadas dentro de la regadera con agua, cuando el agua esté coloreada por los restos de té podrás utilizarla como agua de riego. Con este truco además de alimentar a tus plantas puedes evitar la aparición de hongos.
- Hay que dejar secar todo el agua de las hojas de té. Una vez que están secas debemos enterrarlas mezclándolas con la tierra cerca de las raíces de las plantas.
Para las dos opciones puedes poner tantas hojas de té como quieras. Si le pones grandes cantidades, no corres el riesgo de dañar las plantas. Te recomendamos probar estos trucos, ya que además de reutilizar recursos y producir menos basura, podemos conseguir que nuestras plantas crezcan más fuertes y sus hojas luzcan más brillantes.
Té verde como fertilizante:
El té verde tiene ácido tánico que es capaz de incrementar la acidez del suelo.
Además, también aporta nutrientes y oxigenación, lo cual ayuda a las raíces a crecer con más fuerza.
Existen dos opciones, para preparar el fertilizante.
Puedes simplemente agregar hojas de té verde secas en la misma tierra de tus plantas, o utilizar una infusión de té verde para regar a la planta (una vez esté fría).